Él
se alejaba un poco de mí, escuchando como alguien abría la puerta, haciendo que
Jacobo se echase aún más hacia atrás y yo apartara mis manos de su rostro,
percatándome de que se trataba de Ramona.
—¿Ya
se te pasó el berrinche? —Jacobo comenzaba a voltear lentamente el rostro,
observando por el rabillo del ojo a la esclava que nos miraba divertida.
—Piérdete, negra. —Ramona sonreía,
recostándose de la puerta, mientras yo me ruborizaba ante su rostro pícaro,
aquel que me indicaba que ella sabía lo que sucedía entre Jacobo y yo… ¿Y cómo
no?... ella misma había presenciado aquella declaración de amor de mi parte hacia el
esclavo.
—Solo
me ofrecí para venir a ver si el amo se encontraba bien o lo habías malogrado.
—No sabía si eran ideas mías, pero sus palabras me sonaron a doble sentido.
—La
única persona que va a salir malograda de aquí vas a ser tú si no te largas,
maldito macho con tetas. —Yo apretaba los labios para no reír, al ver como
ellos se trataban, haciéndome sentir mejor ante
mis estúpidas sospechas de que entre ellos dos había algo más que amistad.
—Bien,
me largo… me debes la apuesta —Jacobo, suspiraba tratando de
controlar su mal genio, mientras que yo, aunque trataba de no ver a la cara a
la esclava, sabía que todo aquello se lo estaba disfrutando—.
Les diré que
todo está bien, pero yo que ustedes no me tardaría mucho en salir, Matilde y
Raúl recogen sus pertenencias y querrán volver a su barraca.
La
esclava al fin se retiraba, mientras yo alzaba el rostro para ver de nuevo
aquellos dulces ojos color ámbar que me miraban serenos, acercándose a mí muy
lentamente, posando sus grandes y rústicas manos sobre mi rostro, soltándome
tan cerca que nuestras narices podían rozarse entre sí.
—No
sé cómo haremos esto, y no sé si usted lo desea tanto como
yo, pero… —Jacobo hacía una pausa, observando mis labios, relamiéndose los
suyos—…Yo lo deseo, cada gesto, cada metida de pata suya al pretender salirse
del rollo que causan sus propias palabras saliendo de su boca sin detenerse a
pensar, mientras me revelaba lo que sentía por mí, y ese acento español que
cala hondo en mí, junto a aquella inocencia y castidad hace que lo desee cada
vez más al punto de la desesperación.
Tuve
que aferrarme a sus muñecas, ya que aquel arsenal de pólvora que había arrojado
sobre mí, hacía estallar cada fibra de mi cuerpo al punto de sentir como mi
sexo golpeaba sobre mi ropa, observando en mi mente al endemoniado
Eduardillo arrojándosele con uñas y dientes a un dulce Jacobito hecho de
mazapán y chocolate fundido, mientras el querubín lo jalaba por la cola,
tratando de controlarle.
—No
sabéis lo que eso me ha hecho sentir —le soltaba yo tratando de
controlar mi agitada respiración, sintiendo como él acercaba más su rostro al
mío, percibiendo el olor de su aliento, el cual olía a cacao con un toque de
licor, imaginando que bebían alguna de esas bebidas alcohólicas que ellos se
preparaban con aguardiente, cacao y cebada fermentada.
—¿Qué
le hace sentir? —preguntaba él sin dejar de aferrarme el rostro, mientras que
lo único en lo que podía pensar en ese momento era solo en una cosa.
—Me
hacéis sentir unos locos e irrefrenables deseos de saber que se siente el besar
a un hombre como tú, Jacobo.
No
había terminado de decir aquello, cuando Jacobo arropaba mis labios con los
suyos, humedeciendo los míos y sintiendo la calidez de sus carnosos labios, los
cuales forcejeaban con fuerzas sobre los míos, aunque mi boca no hacía el más
mínimo intento de resistirse a aquel beso, dejándose dominar por la furia
desmedida con la que Jacobo poseía mi boca, en lo que parecía ser un arranque
de lujuria y deseo animal, por hacerme sentir lo mucho que me deseaba.
Yo
llevaba mis manos a su cintura, mientras él rodeaba mi cuello con uno de sus
brazos, y con el otro me apretaba por la cintura, haciéndome sentir
aquella hombría suya, la cual golpeaba la mía, haciendo que ambas se rozaran
por sobre la ropa, mientras su lengua luchaba con la mía, dentro de mi boca,
sin darle tregua alguna, haciendo que mis pulmones perdieran por completo
aquella inercia respiratoria, haciéndome sentir mareos ante la necesidad de
respirar, pero al mismo tiempo, lo que estaba sintiendo era más grande
que mi cordura, y prefería morir asfixiado que alejarme de él.
Al
fin era mío, al fin me entregaba lo que tanto deseaba y no iba a permitir que
se me escapara justo ahora que me daba lo que mi cuerpo pedía a gritos, su
lujuria y deseo carnal, acompañado con lo que mi corazón anhelaba con ansias,
su amor.
Mordió
mis labios, los estrujó contra los suyos, y saboreó mi lengua como
se le dio la gana, yo le aferraba con fuerzas, perdiéndome en aquel beso,
escuchando el crujir de la puerta, apartándonos tan bruscamente el uno del otro, que mi cuerpo sintió como
si bebiera el agua más fresca y dulce, aquella que calmaba mi sed después de un
día de sol inclemente, y que de golpe me arrebataran la
jarra, después de simplemente probar un pequeño sorbo.
Nota del autor: El dibujo a sido creacion mía y la animación estuvo a cargo de mi sobrino Joinner Medina... Gracias Brother... quedo de lujo.
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ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarQuiero leer este libro, tu obra se aprecia muy buena, deseo hacerlo, a primer vista se ve tan atractivo e interesante, que en verdad muero por poder leerlo. Solo que nunca he utilizado Amazon (según la información que ya investigue, la cual no quedó muy clara) y me gustaría saber si puede comprarlo en formato físico.
Te agradecería mucho me ayudaras con esta duda. Me encantaría poder leer la historia a la brevedad posible.
Saludos.
Lizie.
¡Hola Lizie! ¿Cómo estás? "Chocolate" en formato físico estará el año que viene. Podrás adquirirlo por CreateSpace o Amazon. Alguna otra duda, pregúntame, estoy para servir.
Eliminar¡Hola de nuevo!
EliminarMuchas gracias por contestar mi duda; En estos momentos me encuentro un poco desilusionada, no podré leer tu obra hasta el próximo año... Bueno, esperaré ansiosa mientras tanto, hasta poder tenerlo en mis manos, lo que ya es en sí una ventaja, en definitiva lo compraré en Amazon (en mi país, México, hay una sucursal) me será más fácil adquilirlo.
Saludos y mucha suerte en tus proyectos.
Lizie.